Bienvenidos al Programa Formadores de Opinión

Bienvenidos al Programa Formadores de Opinión

Fundación TESA es una institución no partidista que promueve la interacción entre latinoamericanos y ciudadanos del Medio Oriente respetando la diversidad de opiniones, creencias e historia. El proyecto “Formadores de Opinión” trata de una experiencia de campo que proporciona una comprensión más amplia e integral de la relación histórica entre árabes e israelíes y de los conflictos zonales, así como la situación geopolítica y económica de Turquía y Jordania.

domingo, 15 de mayo de 2016

Anuncio oficial Programa TESA Medio Oriente 2016

La Fundación TESA tiene el agrado de anunciar que ya se encuentra organizando el onceavo Programa Senior Medio Oriente de Formado de Formadores de Opinión para la Paz 2016, que se llevará a cabo en el próximo mes de noviembre.






De mantenerse las actuales condiciones en la región, los becarios del programa mantendrán una intensa agenda en distintas ciudades de Israel, Palestina, Jordania y Turquía.

El programa de Formadores de Opinión de la Fundación TESA es único en América y uno de los más importantes del mundo en su tipo. Su objetivo es acercar a líderes de opinión, profesionales, empresarios y actores culturales a una de las zonas más complejas del planeta, a fin de comprender su realidad de primera mano. Como en años anteriores, las actividades se desarrollaran en el campo académico, estando previstas jornadas en las universidades de Tel Aviv , Hebrea de Jerusalén. de Jordania y Koc de Estambul.

En el ámbito político, el programa prevé reuniones que se llevarán a cabo en Israel, tanto en el ámbito parlamentario (Knéset) como en el del Ejecutivo (Ministerio de Relaciones Exteriores). La delegación de TESA se reunirá también con actores políticos y sociales en Turquía. 

Se visitarán importantes centros vinculados con el diálogo intercultural e interreligioso, siendo particularmente destacables las reuniones previstas en el Instituto Truman para la Paz en Jerusalén, en el Real Instituto Inter Fe de Jordania (con asiento en Amán y dependiente de la Casa Real Jordana), y visitas a líderes religiosos judíos, cristianos y musulmanes.

En el ámbito empresarial se realizarán reuniones en los países visitados, estando previstas jornadas dedicadas a negocios en Israel (Economic Departmen, Ministry of Foering Affairs), Jordania (Jordanian Businessmen Association) y Turquía (Foreing Economic Relations Board - DEIK).

El Programa incluye la visita a los Santos Lugares, venerados por judíos, cristianos y musulmanes. Se harán visitas a centros de interés cultural (como por ejemplo la fortaleza de Masada en Israel y la ciudad de Petra en Jordania) y se travesará por tierra los desiertos del Neguev y el Arabá (Israel) con una parada en el Mar Muerto, y Wadi Rum (Jordania).

Para más información sobre el Programa TESA puede hacer click aquí. Respecto de las actividades conexas de la fundación y mayores detalles sobre los últimos dos programas, puede encontrarlas clickeando aquí.
Se puede solicitar información adicional escribiendo a cualquiera de las tres direcciones de email que figuran al margen derecho de esta página. 










lunes, 2 de mayo de 2016

Presentación del Libro "La Casa de Abraham"

Mañana martes 3 de mayo, en el marco de la 42º Feria Internacional del Libro, se llevará a cabo la presentación del libro "La Casa de Abraham", una compilación de trabajos vinculados a la problemática de Medio Oriente y al diálogo intercultural y religioso. 
La Mesa Redonda estará integrada por Claudio Epelman, Presidente del Congreso Judío Latinoamericano, la Diputada Claudia Calciano, legisladora de la Ciudad de Buenos Aires, Norberto Rodriguez, Secretario General de la Asociación Cristiana de Jóvenes (YMCA), Ramiro Anzit Guerrero, especialista en temas de Medio Oriente, Vicepresidente de la Fundación TESA y Susana Pesis, Presidente de la Fundación TESA e impulsora de "La Casa de Abraham".


Presentamos aquí una introducción al libro que, además de los nombrados, incluye trabajos del Padre Ignacio Pérez del Viso S.J., Mauricio Dimant, Directos para América Latina del Instituto Truman (Universidad Hebrea de Jerusalén), Ariel Gonzalez, Universidad Koç de Estambul y Estefanía Larrosa, colaboradora de la Fundación TESA.  
La cita es a las 16:30, en la Sala Adolfo Bioy Casares. Pabellón Blanco. Predio Ferial de Palermo.




¿Por qué La Casa de Abraham?
Por Eduardo R. Callaey[1]

Hace diez años, Susana Pesis, junto a un grupo de ex alumnos del Colegio Carlos Pellegrini, decidieron fundar TESA, que es un acrónimo de Taller de Economía Sustentable Ambiental. Preocupados por los malos hábitos de consumo y producción y con una mirada desde lo económico y lo social, se planteaban la importancia fundamental de cuidar la biodiversidad como factor primario para asegurar un equilibrio ecológico tal que permitiera la vida del ser humano en la tierra.
Pero fueron más allá, planteando —desde la mirada de la alfabetización ambiental— la importancia de cuidar y preservar la diversidad étnica, religiosa y cultural para promover el equilibrio social. Así fue como comenzó el Programa de Formadores de Opinión para la Paz, que en un principio se limitó a la realización de viajes a Israel y Palestina para incluir posteriormente Turquía y, más recientemente, Jordania. Creían que la tarea podía dar frutos yendo a predicar el diálogo en la diversidad en una de las regiones más conflictivas del planeta.
Desde el primer viaje hasta hoy la realidad ha demostrado que la elección de la región era la correcta, pues desgraciadamente el conflicto se fue agudizando hasta llegar al actual nivel de tensión que involucra a prácticamente la totalidad de los países de Medio Oriente y la cuenca del Mediterráneo Oriental. Se comprendió desde un principio que no podía hablarse de biodiversidad y economía sustentable sin enmarcar el problema en uno más grande, que es la ausencia de compromiso en comprender al otro y a su propia percepción de la realidad.
En su libro sobre Las Religiones del Mundo, Houston Smith afirma que pese a la cercanía geográfica, el mundo islámico permanece desconocido para los occidentales, siendo que ambas culturas se extienden a lo largo de una vasta frontera en la que, a lo largo de siglos, se desarrollaron sucesivos conflictos bélicos. En esta exasperante ignorancia de la realidad del otro se asienta gran parte del problema que hoy afecta a judíos, cristianos y musulmanes, cuando en realidad las tres religiones provienen de un mismo tronco que nacieron en el mismo espacio geográfico.
Los viajes del Programa TESA tuvieron, desde su inicio, el claro objetivo de permitir a personas provenientes de la Argentina y otros países de América Latina, acceder a una experiencia directa escuchando, en su propio espacio, a los actores de la compleja trama que divide a los hombres en esa región del mundo. Por otra parte la realidad indica que, de un modo u otro, las principales potencias del planeta tensan sus intereses en la misma cuerda que se extiende desde el norte de África hasta las planicies afganas.
A la fecha, cerca de trescientos profesionales, empresarios, expertos en ciencias políticas, funcionarios, legisladores y periodistas han participado en este programa. El método TESA consiste en una inmersión completa de los becarios en Medio Oriente. Los aspectos más destacados tienen que ver con la cultura, la política, la religión y la economía. Se desarrollan jornadas académicas en las principales universidades de la región, entre las que cabe mencionar las Universidades de Tel Aviv, Hebrea de Jerusalén (Israel), Ammán (Jordania) y Koç  (Estambul, Turquía). En estas jornadas, año tras año, los becarios asisten a conferencias y exposiciones de especialistas en temas políticos, económicos y sociales. Las distintas visiones, muchas veces contrapuestas, permiten una visión global que, rápidamente,  hace entender al becario que el panorama que enfrenta es mucho más complejo que el que imaginaba.
En los últimos años se han incluido en el programa a dos instituciones que están involucradas directamente en el diálogo y en la búsqueda de la paz en Medio Oriente. Una de ellas es el Instituto Truman para la Paz, que tiene su asiento en la Universidad Hebrea de Jerusalén. La otra es el Real Instituto Inter Fe para la Paz, con sede en Ammán y que depende directamente de la monarquía hachemita que reina en Jordania. El Real Instituto Inter Fe ha hecho ingentes esfuerzos por difundir el denominado Mensaje de Amman, que es un alegato del rey Abdullah II en contra del fundamentalismo. El instituto fue visitado por el papa Francisco en su viaje del 2014.
El Programa TESA también promueve reuniones con líderes políticos, parlamentarios y funcionarios de los distintos gobiernos. La agenda política incluye reuniones con diplomáticos acreditados en los países visitados y con diversos grupos de debate político —los denominados think tanks— que expresan opiniones diversas respecto de los gobiernos respectivos. También se indaga la visión de periodistas y de corresponsales de guerra acreditados en la región, que muchas veces brindan información importante respecto de la situación en las fronteras que cruzan a diario en medio de gran peligro.
Otra de las cuestiones esenciales para la comprensión de la problemática de Medio Oriente es la economía, un elemento central en todos los conflictos, ya sea porque existen intereses en juego o porque el comercio es una de las vías más efectivas para el intercambio y el contacto entre culturas. El Programa TESA incluye reuniones de trabajo con asociaciones empresariales en Israel, Jordania y Turquía. En algunos casos las diversas delegaciones de becarios, integradas por empresarios, han expuesto sus actividades y productos, y establecido contactos profesionales y comerciales con la región.
Pero tratándose de un viaje que recorre los principales centros religiosos, una de las actividades más importantes ha sido justamente el contacto con líderes religiosos. Una de estas visitas fue la que precipitó la formación de La Casa de Abraham.
Hacia mediados de noviembre de 2014 la delegación de TESA llegó a Estambul con su novena promoción de becarios. Luego de visitar el Patriarcado de Constantinopla, en el que habíamos podido sentir la preocupación reinante respecto de la persecución de minorías religiosas por parte del ISIS, fuimos recibidos por el Prof. Dr. Rahmi Yaran, Muftí de Estambul, líder espiritual de los musulmanes turcos.
Se produjo entonces un hecho que nos conmovería a todos y que, en última instancia, sería el disparador de este proyecto. Luego de referirse a la situación de persecución y violencia a la que estaban siendo sometidas algunas comunidades religiosas en Irak y Siria y de condenar en duros términos a quienes la estaban llevando a cabo señalándolos como ajenos a los principios del Islam, el Dr. Yaran expresó su profunda preocupación por las consecuencias que estos hechos pudieran tener en Europa occidental. Se refirió concretamente al temor de que se desatara una ola de islamofobia, mencionando a los varios millones de turcos que viven actualmente en países europeos, en especial Alemania. Su alegato a favor de la paz y su condena a todo tipo de violencia religiosa fue contundente.
Finalizada la reunión, a la hora de intercambiar presentes protocolares, el Mufti sorprendió a la presidente de TESA obsequiándole un antiguo ejemplar del Sagrado Corán, al mismo tiempo que la instaba a que realizara todos los esfuerzos posibles para transmitir su mensaje de paz allí donde fuéramos, pero principalmente en nuestros países en América del Sur.
Este gesto no podía quedar sin una respuesta concreta. Ya de regreso en Buenos Aires, Susana Pesis decidió que ese valioso Corán debía ser un símbolo de paz y convertirse en piedra angular de una muestra que reuniera los Libros Sagrados de las tres grandes religiones monoteístas. Así nació La Casa de Abraham, luego de que el Museo Judío de Buenos Aires, dependiente de la Sinagoga de la calle Libertad —la más antigua de la Argentina, hoy monumento nacional— cediera sus instalaciones para la muestra.
En los meses siguientes se fueron asociando voluntades para que este proyecto fuera viable. Los rabinos Sergio Bergman y Simon Moguilevsky, no solo ofrecieron las instalaciones del Museo Judío de Buenos Aires como digno marco a tan generosa iniciativa sino que acompañaron la gestión aportando a la muestra un Tanaj (Biblia Hebrea).
Pronto las noticias llegarían a Israel. Enterado del proyecto, el Gran Rabino de Jerusalén, Dr. Shlomo Amar, ofreció donar El Libro de los Salmos, en idioma hebreo, donde incluiría una bendición para el pueblo argentino de su puño y letra.
Se iniciaron conversaciones con la Iglesia Católica. El padre Fernando Giannetti, en representación de la Conferencia Episcopal Argentina y la Sra. Gloria W. de Padilla, secretaria de la Comisión Episcopal de Ecumenismo, Relaciones con el Judaísmo, el Islam y las Religiones (CEERJIR) y la Editorial Verbo Divino, ofrecieron como donación la Biblia Pueblo de Dios —editada en la Argentina— a la vez que gestionaron la donación de un texto en arameo de la Iglesia Ortodoxa Apostólica de Antioquia y un texto en griego de la Iglesia Apostólica Griega.
El proyecto tuvo también el inmediato apoyo de la Iglesia Evangélica Luterana Unida, que donó un antiguo himnario. De modo que, luego de varios meses de trabajo intenso, habíamos logrado que la comunidad judía y las distintas expresiones del cristianismo se sumaran a La Casa de Abraham para conformar —junto con el Corán— una colección de textos sagrados provenientes de las tres Grandes Religiones del Libro.
El día 8 de octubre de 2015, casi un año después de que Susana Pesis recibiera el Sagrado Corán de manos del Mufti de Estambul, quedaba inaugurada la muestra en el hall de la propia Sinagoga de la calle Libertad en un acto que contó con un nutrido público y la presencia de los embajadores Tanner Karaças (Turquía), Doris Shavit (Israel), Karin Proidl (Austria), Bernhard Graf von Waldersee (Alemania), Jean-Michel Casa (Francia) y Noah Mamet (Estados Unidos de América). La presencia de este grupo de diplomáticos marcaba claramente que la iniciativa excedía el marco local.
El evento fue celebrado por los rabinos Sergio Bergman y Simón Moguilevsky, el padre Fernando Giannetti, representante arquidiocesano para el diálogo interreligioso, los pastores luteranos Alan Eldrid y Gustavo Gómez Pascua, este último presidente de la Iglesia Evangélica Luterana Unida en la Argentina y Uruguay y el obispo José Bosch de la  Iglesia Ortodoxa Griega del Patriarcado de Constantinopla.
Durante el transcurso del evento, el embajador de Turquía, Tanner Karaças, se dirigió al público para manifestar que esa reunión de cristianos, judíos y musulmanes, le traía reminiscencias del barrio en el que había crecido, en el que era habitual la convivencia religiosa y la presencia de sinagogas, mezquitas e iglesias cristianas. En esa atmósfera de concordia, Karaças leyó un mensaje enviado por el Mufti de Estambul, enterado del acto que se estaba realizando en Buenos Aires. Esto es lo que dijo:

Alá Todopoderoso, comenzando desde el primer hombre nos ha enviado mensajes a toda la humanidad, y nos ha mostrado el camino a la felicidad. Estos mensajes fueron enviados a través de los profetas elegidos entre el pueblo. El Corán establece claramente el nombre de 25 profetas, así como también aclara que no se limitan a ese número. El profeta Abraham, el profeta Ismael, el profeta Isaac, el profeta Moisés y el profeta Jesús, son algunos de los mencionados en el Corán. Todos ellos han llevado el mensaje a la humanidad de que Dios es uno, sin nadie que se le equipare ni parezca. Aquellos mensajes divinos de los profetas son en esencia los mismos que luego fueron diseminados a las siguientes generaciones en textos escritos.
El Sagrado Corán es el mensaje divino que ha venido con el último profeta, Muhammad, y conserva su estado original hasta el día de hoy sin cambio alguno. El Corán hace referencia como 'Gente del Libro' a las comunidades anteriores al Islam basadas en los mensajes de los profetas (los del libro, creyentes en el libro), y los coloca en un lugar común e invita a la comprensión: "Di: '¡Gente del Libro! Convengamos en una fórmula aceptable a nosotros y a vosotros, según la cual no serviremos sino a Alá, no le asociaremos nada y no tomaremos a nadie de entre nosotros como Señor fuera de Alá'." (Al-Imran, 3:64).
Los musulmanes, que adoptaron la comprensión del Islam, han convivido junto con todas las comunidades judías y cristianas que dieron respuesta positiva, o no, a esta convocatoria; han proporcionado la seguridad en sus vidas, propiedades y creencias. Este es un requisito de su fe y es una petición del Corán.
Los círculos que sostienen el poder en el mundo, pueden construir un futuro de paz teniendo en cuenta los derechos de las diferentes religiones. En este ambiente de paz, todos pueden vivir y transmitir libremente sus creencias a las generaciones futuras. Además, las personas pueden conocer diferentes creencias y quienes quieran profesar su fe a una amplia audiencia se pueden beneficiar en este ambiente de paz sin insultar a nadie.
Envío mis saludos y mis mayores deseos de éxito a todos los involucrados en este evento organizado por TESA, que con gran esfuerzo contribuye a la paz y esperanza del mundo, y a la construcción de un futuro mejor.

Estambul, 8 de Octubre de 2015
Prof. Dr. Rahmi YARAN
Mufti de Estambul

Con estas palabras quedaba inaugurada una muestra que no pretende ser un espacio físico sino el producto del encuentro espiritual entre los descendientes del patriarca Abraham, celebrando la diversidad de la misma revelación del monoteísmo ético y humanista en la Sagrada Tora, en los Santos Evangelios y en el Sagrado Corán.
Habíamos cumplido con el deseo de Rahmi Yaran al convertir aquel antiguo Corán en el cimiento de una Casa común erigida a la paz y al diálogo interreligioso. Pero con ese acto no concluía nuestra intención, sino que comenzaba. La Casa de Abraham debía convertirse en un edificio espiritual consagrado a la tarea que siempre animó los objetivos de la Fundación TESA: predicar el diálogo en la diversidad en una de las regiones más conflictivas del planeta. Y estábamos convencidos de que el acto que acabábamos de realizar en Buenos Aires no podía quedar limitado a esta lejana geografía sino que debía regresar al lugar en el que había nacido la iniciativa.
Un mes después de la inauguración de La Casa de Abraham, un nuevo contingente de la Fundación TESA marchó hacia Medio Oriente para cumplir su programa anual de becarios; pero esta vez se agregaba la necesidad de encontrar interlocutores que nos apoyaran en la difusión y replica de lo que aquí se había logrado.
Durante dos semanas recorrimos las principales ciudades de Israel, atravesamos el desierto jordano y llegamos finalmente a Estambul. En el camino tuvimos la oportunidad de exponer nuestro proyecto La Casa de Abraham en el Instituto Truman de la Universidad Hebrea de Jerusalén ante Mauricio Dimant. En efecto, The Harry S. Truman Research Institute for the Advancement of Peace no solo había adherido a la presentación de La Casa de Abraham, sino que ahora nos recibía ante el hecho consumado. En Amman nos reunimos con la Dra. Majeda Omar, Directora de The Royal Institute for Inter-Faith Studies (RIIFS), con la misma intención de sumar organizaciones comprometidas con la paz y el diálogo entre culturas.
Finalmente, como si se completara la primera vuelta de un espiral, nos reencontramos con el Mufti, el hombre que había entregado aquel Sagrado Corán como prenda de paz, al que ahora podíamos decirle que su deseo se había cumplido.
Hasta aquí la crónica de los hechos.
La idea de reunir en un libro algunas reflexiones en torno a la ética común de las tres religiones monoteístas surgió casi espontáneamente en el mismo momento en que se articulaban las primeras ideas en torno a La Casa de Abraham. Creímos que un documento escrito, que bien podía ser el primero de una serie dedicada a reunir los esfuerzos comunes para el diálogo entre las religiones y culturas surgidas en Medio Oriente, era una herramienta que no podíamos soslayar. Pero todo texto tiene un pretexto y un contexto, es decir, una necesidad previa que lo justifica y un marco en el que se publica.
Quienes hemos tenido la fortuna de participar en el Programa de Formadores de Opinión para la Paz sabemos que hay un antes y un después de la experiencia de Medio Oriente. La necesidad de sentir la realidad más allá de las noticias que llegan filtradas por el tamiz de un medio gráfico o televisivo se percibe apenas se toma contacto con los actores que hacen a la dinámica de la región.
La crisis de los refugiados, la creciente preocupación en torno al desplazamiento de millones de seres humanos como no se veía desde hace mucho tiempo, sumado al discurso intolerante de algunas organizaciones a ambos extremos del conflicto, hace cada vez más importante la mirada directa, ausente de intereses, dispuesta a tender puentes en medio de un clima, de a ratos, exasperante.
Las razones que nos llevan a presentar este primer volumen de La Casa de Abraham surgen de la impostergable tarea de encontrar a aquellas voces que, aun en medio del ruido violento del desacuerdo, mantienen la tenacidad del que sabe que posee una única opción: el diálogo.



[1] Escritor. Editor. Coordinador del Programa Medio Oriente - Formadores de Opinión para la Paz, de la Fundación TESA. Líder de Proyecto de La Casa de Abraham. Compilador de la presente edición.